«Pase sin llamar»

Como los cartelitos que ponen en algunas oficinas, te invito a recorrer el blog con toda libertad y a conocerme a través de mis reflexiones cotidianas a la luz de las enseñanzas de la Fe Bahá'í. ¿Tenés un ratito? Vení a relajarte y a leerme, café de por medio. Estaré esperando tus comentarios y reflexiones para conocernos un poco más.
La idea es que en el acto de compartir la luz propia a través de nuestras palabras y convicciones, nos enriquezcamos mutuamente y podamos brillar como verdaderos soles en el mundo de la creación.
¡Bienvenid@!
mon blog

viernes, 24 de febrero de 2012

El Ültimo Post

Este es la última entrada que voy a hacer en el blog, al menos por un tiempo. La mayoría de las entradas están relacionadas con la Fe Bahá'í, mi religión porque esa fue la idea que dio vida al blog originalmente. Pero de un tiempo a esta parte, como es notorio en las entradas, mi vida cambió muchísimo, y prefiero mantener lo bello de la Fe Bahá'í lejos de toda mancha que pueda salpicarle mi persona en construcción.

Algunos de los cambios que experimenté fueron positivos, otros no tanto. Varias cosas siguen cambiando en mi vida, que yo cambie de blog no es tan raro. Los amigos que mencioné, todos con nombres falsos excepto Lautaro y Fabi, ya no están conmigo. En el caso de ellos dos porque se fueron a vivir a otro lado, y aunque me invitaron a irme con ellos, sentí que no era mi momento. Otros, se alejaron simplemente porque dejaron de quererme, aunque yo no a ellos.

No voy a cerrar este blog, primero porque no sé cómo se hace, y segundo porque no quiero, después de todo, aquí está en palabras una linda parte de mi vida, la que refleja todo el amor que la Fe Bahá'í me inspiraba en su momento. Todavía lo sigue haciendo, pero no puedo volver a ella hasta que termine de encontrarme, pues como dije, no quiero dañar algo tan bello y perfecto con mis equivocaciones.

No sé si habrá alguien leyéndome por ahí o no, pero siento la necesidad de despedirme, aunque sea de mí mismo. No voy a dejar de escribir, de hecho hoy cierro este blog e inauguro uno nuevo en wordpress. Ahí voy a seguir con una de las actividades que más me gustan y que me está ayudando bastante últimamente: escribir.

domingo, 1 de enero de 2012

Me Prometo A Mí Mismo...

Primer día del año, buen momento para hacerme un regalo y hacer mis resoluciones para el 2012. Pero primero, mi regalito, una canción de Devon Grundy con una letra poderosísima.

Devon Gundry - "Armed".



Christian Larson me ayudó a abrir los ojos y la mente, y me confirmó qué es lo importante en la vida, así que con eso en mente, trazo mis metas para este año. No sé si lograré cumplirlas, pero sí sé que voy a esforzarme y que, más allá del resultado, voy a terminar siendo mejor de lo que soy ahora. Así que aquí voy.


Me prometo a mí mismo...

Ser lo suficientemente fuerte para que nada pueda interrumpir mi paz mental.

Hablar de salud, alegría y prosperidad a toda persona que encuentre.

Lograr que todos mis amigos sientan que hay algo valioso en ellos.

Verle el lado positivo a todo y lograr que mi optimismo sea una realidad.

Pensar únicamente en lo mejor, trabajar únicamente por lo mejor y esperar solo lo mejor.

Sentir entusiasmo por el éxito de los demás, tal como lo siento por el mío propio.

Olvidar los errores del pasado y enfocarme en los grandes logros del futuro.

Reflejar una expresión de gozo todo el tiempo y brindar una sonrisa a todo ser viviente que encuentre.

Dedicar mucho tiempo a superarme, de tal forma que no me quede tiempo para criticar a otros.

Ser muy grande para no preocuparme, muy noble para no sentir enojo, muy fuerte para no tener miedo y demasiado feliz para no permitir la presencia de cualquier problema.

Sentirme bien conmigo mismo y proclamar esta verdad al mundo, no con palabras sino con grandes acciones.

Vivir en la convicción de que el mundo entero está de mi lado, siempre y cuando logre mantenerme fiel a lo mejor de mi mismo.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Blanco y Negro y En El Medio, Una Felicidad Gris




Estos últimos días me está pasando de todo. Me reparto entre lo lindo y lo feo, tratando de inclinarme hacia la mitad positiva pero con bastante esfuerzo porque la otra mitad, al ser de la misma medida e intensidad, tira con fuerza.

Desde hace tiempo que tengo ganas de compartir mi departamento con algún amigo con el doble propósito de compartir momentos y ganar compañía. Se me cumplió el deseo con quien menos imaginé y todo va viento en popa, no me puedo quejar. Claudio (obviamente, no es su nombre verdadero) se vino a vivir conmigo de un rato para otro. En la mañana estábamos conversando por mensajes de texto y al mediodía ya estaba instalándose en mi casa así como si nada. Llegó con su moto y su mochila y a la media hora parecía que ya estaba viviendo en casa desde siempre. Como plus, hace pocos días llegó mi sobrino y también se instaló en mi casa, así que el deseo de estar acompañado se me hizo realidad después de todo, y con creces.

Por otro lado, mi bolsillo anda pidiendo auxilio. El sueldo atrasado de un proyecto en el que participé se hace rogar y no aparece todavía. No sé si por burocracia, corrupción o una diabólica combinación de ambas, el sueldo se atrasa y mi desesperación aumenta. Yo ya tenía todo planeado: el viernes me iría a Orán a despedir el año con dos buenas amigas que tengo allá, el sábado regresaría a recibir el año nuevo en una fiesta privada con piscina y todo, y al otro día, el primer día del 2012, descansaría en la pileta toda la tarde recobrando fuerzas para salir en la noche. Pero hoy recibí una noticia confusa. El dinero de mi sueldo está, pero no está. Es decir, está en algún lado del tortuoso camino de la burocracia política, menos en lugar donde debería estar: en mi bolsillo. Así que el deseo de recibir el año nuevo con todo parece que se va a postergar un poco, trescientos sesenta y cinco días para ser exacto, a no ser que esta vida –que cada vez se me parece más a una novela venezolana que a una comedia romántica– dé un giro de último momento y yo reciba una buena noticia antes del viernes.

Para equilibrar un poco la balanza, Cupido me sonríe. Dicen que apenas Yanina me vio, le gusté mucho. Hay dos explicaciones posibles para eso: la primera que se me ocurre es que yo estaba lejos, llevaba puesta una gorra, era de noche y no había mucha luz donde yo estaba. La segunda es más creíble: soy lindo. No hay nada que hacer, me quedo con la segunda explicación, es más realista. El caso es que Yanina pidió mi número pero no se animaba a mandar el primer mensaje. Ataque de machismo que tienen las chicas a último momento. Como aparte de lindo y humilde soy caballero, tuve que despachar el primer mensaje yo. El segundo y todos los que le siguieron fluyeron como el agua, para alegría nuestra y enriquecimiento de la compañía telefónica. Por una razón u otra (todas ellas razones negras, por supuesto), Yanina y yo no podemos encontrarnos aún. Dios sabrá por qué hace las cosas. Acaso de encontrarnos, provocaríamos un incendio que haría arder el mundo y la humanidad no llegaría a verle ni la pestaña al 2012 por culpa nuestra. Mejor así, tiempo al tiempo que quiero comprobarles a todos los malinformados que el 12 de diciembre de 2012 va a hacer mucho calor por estos lados, pero la tierra no se va a partir en dos.

Lo último que me pasó hoy fue negro, y así termina este día lamentablemente. Tengo un amigo con el que no venimos bien desde hace tiempo (así que no sé si está bien decir que aun lo “tengo”). Yo llegué a quererlo mucho y terminé viendo en él al hermano que siempre quise y nunca tuve. De semejante calidad y así de grande eras (¿es?) mi cariño por él. Algún día escribiré sobre Juan Esteban, ahora basta con decir lo que sigue. Me di cuenta que cuando estoy bien con él me sale el Juanes espontáneamente, pero cuando me enoja me sale un Juan a secas, también espontáneamente. Ahora no solo estoy enojado, también estoy dolido y decepcionado. A pesar de saber que detesto la mentira, Juan eligió mentirme. Hace unos días, sucedió una tontería que amenazó con terminar toda la relación. Me hizo caminar de plaza en plaza por toda la ciudad en un calor insoportable, buscándolo. Al notar mi enojo por teléfono, ni siquiera se molestó en pedir disculpas sino que mantuvo una postura tonta que insultaba toda inteligencia con la más ridícula de las excusas (léase mentiras). Me sentí estúpido e insultado. Sentí bronca de que me refregara en la cara que semejante cariño, admiración y respeto de mi parte no eran mutuos en absoluto de parte suya. Lleno de ira y decepción, eliminé su número de mi agenda telefónica –algo simbólico y contundente para mí– y apenas tuve acceso a internet, cerré mi cuenta en Facebook con la idea de que quien no me respeta no merece saber nada de mí. Desde entonces el contacto y la comunicación son mínimos. Hace un rato estuvo en mi casa y tuvimos unos minutos a solas. La indiferencia y la distancia que sentí de su parte me hicieron reflexionar y caer en la cuenta de que nos estamos perdiendo. Por supuesto, no me gusta la idea, pero siento que hice de todo para acercarme y acercarlo pero él no quiere. Cuando Juanes se fue, me quedé pensando en cómo irá a terminar todo esto. Estoy a punto de abandonar el único espacio en el que tenemos contacto, y de ser así no nos veremos más, así que veré cómo van las cosas hasta la medianoche del 31 de diciembre. Como este jueves le toca viajar no nos vamos a ver, de modo que si no se comunica conmigo hasta la medianoche, esta amistad, que podría haber sido grandiosa, terminará el sábado cuando el 2011 muera. De contactarse, voy a tomarlo como la señal de parte de Dios de que junto con el 2012, nuestra amistad tiene que renacer y haremos borrón y cuenta nueva… ¿Qué pasará de hoy en adelante? No lo sé. Blanco o negro, Dios va a enviar una señal que voy a obedecer.

Mientras tanto y en el medio, una felicidad gris predomina en mi vida. Trato de aferrarme a la parte blanca y luminosa de mi existencia, pero a veces no puedo conmigo mismo. Lo sigo intentando porque cuando mire hacia atrás quiero tener la tranquilidad de que, más allá del resultado, hice todo lo posible en todos los aspectos para terminar bien lo que queda de este año.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Los Tres Árboles



LOS TRES ÁRBOLES

Érase una vez en la cumbre de una montaña, tres pequeños árboles, juntos y pensando sobre lo que querían llegar a ser cuando fueran grandes.

El primer arbolito miró hacia las estrellas y dijo: “Yo quiero guardar tesoros. Quiero estar repleto de oro y ser llenado de piedras preciosas. ¡Yo seré el baúl de tesoros más hermoso del mundo!”

El segundo arbolito miró un pequeño arroyo realizando su camino al océano y dijo: “Yo quiero viajar a través de aguas temibles y llevar reyes poderosos sobre mí. ¡Yo seré el barco más imponente del mundo!”

El tercer arbolito miró hacia el valle que estaba debajo de la montaña y vio hombres y mujeres trabajando en un pueblo trabajador. “Yo no quiero irme nunca de la cima de la montaña. Yo quiero crecer tan alto que cuando la gente del pueblo se pare a mirarme, ellos levanten su mirada al cielo y piensen en Dios. ¡Yo seré el árbol más alto del mundo!”

Los años pasaron. Llovió, brillo el sol, y los pequeños árboles crecieron alto. Un día, tres leñadores subieron a la cumbre de la montaña. El primer leñador miró al primer árbol y dijo: “¡Qué árbol tan hermoso es este!” Y con la arremetida de su hacha brillante el primer árbol cayó. “Ahora me deberán convertir en un baúl hermoso, ¡habré de contener tesoros maravillosos!”, dijo el primer árbol.

El segundo leñador miró al segundo árbol y dijo: “Este árbol es muy fuerte, es perfecto para mí.” Y con la arremetida de su hacha brillante, el segundo árbol cayó. “Ahora habré de navegar aguas temibles”, pensó el segundo árbol, “¡Habré de ser un barco imponente para reyes temidos y poderosos!”

El tercer árbol sintió su corazón sufrir cuando el último leñador lo miró. El árbol se paró derecho y alto y apuntando ferozmente al cielo. Pero el leñador ni siquiera miró hacia arriba y dijo: “Cualquier árbol es bueno para mí.” Y con la arremetida de su hacha brillante, el tercer árbol cayó.

El primer árbol se emocionó cuando el leñador lo llevó a una carpintería. Pero el carpintero lo convirtió en una caja de alimento para animales de granja. Aquel árbol hermoso no fue cubierto con oro ni llenado con tesoros, sino que fue cubierto con polvo de cortadora y llenado con alimento para animales de granja hambrientos.

El segundo árbol sonrió cuando el leñador lo llevó cerca de un embarcadero, pero ningún barco imponente fue construido ese día. En lugar de eso, aquel árbol fuerte fue cortado y convertido en un simple bote de pesca: era demasiado chico y débil para navegar en el océano –ni siquiera en un río–, y fue llevado a un pequeño lago.

El tercer árbol estaba confundido cuando el leñador lo cortó para hacer tablas fuertes y lo abandonó en un almacén de madera. “Qué estará pasando”, fue lo que se preguntó el árbol. “yo todo lo que quería era quedarme en la cumbre de la montaña y apuntar a Dios...”

Muchísimos días y noches pasaron. A los tres árboles ya casi se les habían olvidado sus sueños. Pero una noche, una luz de estrella dorada alumbró al primer árbol cuando una joven mujer puso a su hijo recién nacido en la caja de alimento. “Yo quisiera haberle podido hacer una cuna al bebé”, le dijo su esposo a la mujer. La madre le apretó la mano a su esposo y sonrió mientras la luz de la estrella alumbraba la madera suave y fuerte de la cuna. La mujer le dijo: “Este pesebre es hermoso.” Y de repente, el primer árbol supo que contenía el tesoro más grande del mundo.

Una tarde, un viajero cansado y sus amigos se subieron al viejo bote de pesca. El viajero se quedó dormido mientras el segundo árbol navegaba tranquilamente hacia adentro del lago. De repente, una impresionante y aterradora tormenta llegó al lago. El pequeño árbol se llenó de temor; él sabía que no tenía la fuerza para llevar a todos esos pasajeros a la orilla a salvo con ese viento y esa lluvia. El hombre cansado se levantó, se puso de pie y, alzando su mano, dijo: “Calma.” La tormenta se detuvo tan rápido como comenzó. Y de repente el segundo árbol supo que él llevaba navegando al Rey del Cielo y de la Tierra.

Un viernes en la mañana, el tercer árbol se extrañó cuando sus tablas fueron tomadas de aquel olvidado almacén de madera. Se asustó al ser llevado a través de una impresionante multitud de personas enojadas. Se llenó de temor cuando unos soldados clavaron las manos de un hombre en su madera. Se sintió feo, áspero y cruel. Pero un domingo por la mañana, cuando el sol brilló y la tierra tembló con júbilo debajo de su madera, el tercer árbol supo que EL AMOR DE DIOS HABÍA CAMBIADO TODO. Esto hizo que el árbol se sintiera fuerte, pues cada vez que la gente pensara en el tercer árbol, pensaría en Dios. Eso era mucho mejor que ser el árbol más alto del mundo.

La próxima vez que te sientas deprimido porque no conseguiste lo que tú querías, sólo siéntete firme y sé feliz porque Dios está pensando en algo mejor para darte.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Quien Te Quiere Te Valora y Te Respeta

Está claro: la persona que te quiere, te valora y te respeta.

Anoche, una conversación corta y desafortunada me dejó de mal humor porque me hizo pensar en todas esas veces que yo cedí frente a un amigo que me dio varios NO muy contundentes a cambio. Siempre sentí que este amigo y yo éramos cercanos y estábamos unidos, pero luego de esta conversación caí en la cuenta de que el profundo sentimiento de amistad que me enorgullecía no era mutuo. Y cuando eso ocurre, no hay amistad, solo dependencia de uno hacia otro. Dolor, bronca e impotencia me revolvieron el estómago, pero es así y no hay nada que yo pueda hacer al respecto, salvo desprenderme de esta relación e independizarme.

No llegué solo a esta conclusión, mi cabeza no daba para tanto en ese momento. Al verme serio y de mal humor, mi amigo Lautaro comenzó a hablarme en tono de hermano mayor y recién entonces pude ver algo importante en todo esto.

_Vos cedés porque sentís que necesitás a esa persona a tu lado, pero no es así –me dijo, casi sin dejarme terminar la frase que yo estaba armando.

Me callé y escuché. Aun sin siquiera saber de quién o quiénes yo estaba hablando, Lautaro diagnosticó la situación con bastante exactitud. Callé, escuché y pensé. Finalmente, Superman, como le digo yo, cerró el tema con una conclusión corta y definitoria que me aclaró las cosas:

_Quien te usa no te quiere, Emma, pero vos tampoco los necesitás.

Luego me habló de lo buena gente y buen amigo que soy y, acto seguido, nos pusimos a jugar y me agarró a patadas. Yo terminé con el cuerpo molido a golpes –él, enorme y Superman como es, quedó intacto.

Para cuando llegué a casa, tarde ya, sentí que tenía la mente más clara y en el pecho, la sensación de que comenzaba a desprenderme…




Jorge Bucay lo explica con un cuento.

martes, 13 de diciembre de 2011

Quiero...



¿Qué me hace falta para ser libre e independiente de todo? ¿Por qué amar tiene que ser tan doloroso? No me doy tiempo a sufrir, la respuesta me viene inmediatamente a la cabeza: porque nos enamoramos de quien no debemos. ¿Se puede controlar de quién enamorarse? ¿Cómo? Sí se puede, yo lo hice durante años, pero creo que fallé en el método porque me encerré mucho en mí mismo. Por esa razón, apenas bajé la guardia me enamoré de quien no debía. Primero habrá que conocer a la persona en el terreno de la amistad, el lugar donde uno se muestra tal cual es porque no espera nada a cambio ni tiene agendas ocultas. Sabiendo esto, ¿cómo pude terminar enamorándome de quien no debía? Porque estaba necesitado de amor, porque había subido tanto la guardia que nadie podía pasar, ni yo salir. Y cuando la bajé, la bajé mal. Ahora lo único que quiero es desenamorarme, y hasta donde puedo ver, hay dos cosas que pueden ayudarme. Por un lado, poner tiempo y distancia entre esta persona y yo, y por otro, que el amor de mi vida –porque aun es el amor de mi vida– me trate como a su amigo especial, que me demuestre que soy, aunque amigo, un amor importante en su vida… Pero, ¿lo soy…?

Me queda pendiente la primera pregunta. Una respuesta que se me viene a la cabeza es enfocarme en algo que me guste, en algo que me apasione y encontrar en ello mi forma de crear una nueva realidad para mí. Escribir solía ayudarme, pero estoy tan borracho de este amor que no sé por dónde empezar ni cómo hacerlo. Si tan solo me abrazaras de vez en cuando y me trataras como al resto de tus amigos, yo sería feliz y sacaría fuerzas para salir de este enredo. Pero parece que te gusta tenerme prisionero, de a ratos te beneficiás de esto mientras que yo aquí, en mi soledad y en mis cadenas, sufro.

Quiero volver a ser el dueño de mí mismo, volver a ser yo en una versión mejorada de mí. Quiero poder soltarte y hacerlo de una vez. Cuando no te veo siento que puedo, así que por ahora quedate donde estés –ya sea aquí a la vuelta o a dos mil kilómetros, no sé, no me digás dónde porque en algún momento de debilidad soy capaz de buscarte hasta con el Google Map–, y no te dejés ver por un buen tiempo, los dos sabemos que no te va a costar. En este punto Don Destino tiene que ayudarme impidiéndote encontrarme cada vez que me busqués, si es que me buscás. Pero de vez en cuando llamame y decime que me querés, que me extrañás, que me buscás, que querés verme, y que qué será que lo intentás pero no podemos encontrarnos, pero decilo en serio porque tengo un olfato especial para descubrir las mentiras, vos ya lo sabés. Y con el tiempo, si Dios se apiada de mis lágrimas y de mi corazón cansado, voy a encontrar el camino de regreso a mí y ahí, libres los dos, yo de vos y vos de mí (porque de alguna manera también te atrapé en esto), vamos a poder caminar juntos, esta vez lado a lado, como los mejores amigos que debimos ser desde el principio…

sábado, 23 de mayo de 2009

Fredi




Por Rafael Urretabizkaya

Este cuento fue tomado de la revista El Monitor de la Educación, Nº 20 - 5º Época, marzo de 2009, publicada por el Ministerio de Educación de la Nación Argentina.



Cuando en la escuela todos se pusieron contentos porque llegaba el viernes; Fredi, no.

Cuando todos se juntaron el sábado a jugar a la pelota y discutieron a quién le tocaba patear para abajo, a Fredi le dio igual.

Cuando la mamá amenazó el domingo con el baño, fue Fredi y se bañó.

El lunes en la escuela, Fredi miró para el lado de la ventana y para el de las cuentas, pero no pudo tirar ni una mirada para el tercer banco.

El martes pudo, pero con ojos revoleados que le devolvieron una imagen toda tembleque.

El miércoles pudo de nuevo, pero en medio de un ataque de risa y sin que hubiera pasado nada gracioso. Fredi pudo, incluso, pensar en medio del risazo, ¿por qué hago esto? Pero la risa le ganó al pensamiento.

El jueves no pudo otra vez. Quizás fue por lo de la risa del miércoles, o porque no, pelado; nunca se sabrá.

Llegó el viernes y cuando todos se pusieron contentos, Fredi, no.

El sábado volvieron a la canchita. Ya no había puelche*, entonces a todos les daba igual patear para el arco de abajo o el de arriba; a Fredi, también.

El domingo la mamá dijo baño, y le sobraron todas las amenazas y explicaciones porque con esa sola palabra alcanzó para que Fredi se entregara.

El lunes miró para el tercer banco... pero estaba vacío.

El martes no miró, pero supo todo el tiempo que estaba ocupado.

El miércoles miró con ojos revoleados, ¡pero así es imposible!

El jueves arrancó sereno pero otra vez le ganó la risa. La risa dos, sereno cero, parece que pensó.

El viernes, cuando todos se pusieron felices porque por fin llegaba el fin de semana; Fredi, no.

El sábado se quedó en casa jugando a la bolita. Se quedó como la vez que estuvo enfermo, pero estando sano.

El domingo se bañó antes de que se lo pidieran y ahí fue que su mamá aceleró la preocupación.

El lunes su mamá lo acompañó a la escuela y habló con la señorita Rosana, que le dijo: "Tu chico anda muy distraído, además de abstraído, ausente y anónimo, hacelo revisar". Cuando dijo el chico la maestra se refería a Fredi y con todo lo demás quiso decir que andaba en la luna.

El martes la mamá lo llevó al médico y Fredi faltó a la escuela. El doctor le pidió un análisis de materia fecal y otro de orina, que es lo mismo que la caca y el pis pero en otro idioma.

El miércoles fue a la escuela, miró para el tercer banco, pero se puso un libro delante de los ojos como tratando de evitar encandilarse.

Por la tarde hizo caca y pis en dos frasquitos, y llevaron al médico materia fecal orina.

El jueves volvió la risa traicionera, una risa que se mandó sola. Que no pidió permiso, ni perdón, ni chiste; arrancó y chau. La risa tres, pensó, abatido por la goleada.

El viernes todos se pusieron contentos porque era viernes. Fredi, no.

El sábado fue a la canchita pero se quedó a un costado dibujando corazones en el suelo, después se volvió porque tenía ganas de algo que no sabía si era orinar o solamente hacer un poco de pis.

El domingo se juntó la familia: el abuelo, la abuela, todos los de la casa y, además, la tía Julita. Supo que hablaban de él porque le tiraban miradas resbaladizas, y eso que desde siempre lo habían mirado de pechito. "Los frasquitos", pensó.

El lunes fueron al médico.

El médico andaba contento por algo que no se preguntó y no tuvo el deseo de explicar, pero andaba contento. Aunque los frasquitos no se hicieron presentes en el momento de la consulta se notó que habían dicho lo suyo, porque la única vez que fueron nombrados el médico dijo tres no, apretados. Dijo así: nonono. Tres no apretados, en medicina quiere decir nada que ver.

El martes Fredi miró al tercer banco, pero justo desde el tercer banco miraban para la ventana.

El miércoles miró otra vez al tercer banco y desde ahí otra vez miraban para la ventana; entonces, Fredi miró para la ventana.

En esa ventana se forma un alero que cae cerrado contra la pared y Fredi vio lo que miraban desde el banco de atrás. Una parejita de lloicas que habían armado un nido y tenían tres huevitos y todo.

Entonces miró la ventana y después al tercer banco, a ella, a Vanina. Y no tuvo ataque de risa ni ojo revoleado, ni tuvo necesidad de decirle que se había enamorado tanto hasta tener que hacer caca en un frasquito.

Ella le hizo shhh, con un dedo delante de la boca. Como queriendo decir que no dijera lo del nido. Fredi le contestó con una sonrisa como queriendo entender todo lo que él necesitaba, y ahí nomás supo que tenían un nidito y un secreto.

Ese mismo sábado, Fredi volvió a jugar al fútbol en la canchita, no hizo ningún gol pero estuvo contento como si hubiera hecho unos cinco.

El domingo se resistió al baño con todas sus mañas y la mamá, aunque se hizo la empacada, estuvo contenta.

El lunes nacieron los pichones.



*Puelche: viento del este.


Rafael Urretabizkaya nació en Dolores, Buenos Aires, en 1963. Desde hace 25 años vive en el sur de Neuquén, donde trabajó como maestro en distintas comunidades rurales. Hace tres años que es maestro de la Escuela Nª 188 de San Martín de los Andes. rafabzk@smandes.com.ar

miércoles, 22 de abril de 2009

A Los Bahá'ís del Mundo - Mensaje de Ridván 166

Ridván 2009


A los Bahá’ís del Mundo

Queridos amigos bahá’ís:

Hace apenas tres años, presentamos ante el mundo bahá’í el reto de aprovechar el marco de acción que había surgido con tanta claridad al término del último Plan global. La respuesta, como lo esperábamos, fue inmediata. Con gran vigor los amigos en todas partes empezaron a perseguir la meta de establecer programas intensivos de crecimiento en no menos de 1.500 agrupaciones en todo el mundo, y la cifra de dichos programas empezó a crecer enseguida. Pero nadie podía haberse imaginado en aquel momento lo profundo de la transformación que el Señor de las Huestes, en Su sabiduría inescrutable, había previsto para Su comunidad en un espacio de tiempo tan corto. ¡Qué comunidad más segura y resuelta la que celebró sus logros en el punto medio del Plan actual en cuarenta y una conferencias alrededor del mundo! ¡Qué contraste tan extraordinario se pudo apreciar entre su coherencia y energía y el desconcierto y confusión de un mundo atrapado en crisis! Ésta era, de hecho, la comunidad de los bienaventurados a la que Shoghi Effendi se había referido. Era una comunidad consciente de las vastas potencialidades con las que había sido dotada y conocedora del papel que está llamada a desempeñar en la reconstrucción de un mundo quebrantado. Era una comunidad en auge, sujeta a una dura represión en una parte del mundo, mas levantándose como un todo unido sin detenerse ni amedrentarse y aumentando su capacidad para hacer realidad el propósito de Bahá’u’lláh de liberar a la humanidad del yugo de la más dolorosa opresión. Y en los cerca de ochenta mil participantes en las conferencias vimos el surgimiento en la escena histórica de un creyente sumamente seguro de la eficacia de los métodos e instrumentos del Plan y notablemente diestro en su empleo. Cada una de las almas de este inmenso mar fue el testimonio del poder transformador de la Fe. Cada uno fue prueba de la promesa de Bahá’u’lláh de ayudar a todos los que se levanten con desprendimiento y sinceridad a servirle. Cada uno fue un indicio de esa raza de seres, consagrados y valientes, puros y santos, destinada a evolucionar con el paso de generaciones bajo la influencia directa de la Revelación de Bahá’u’lláh. Vimos en ellos los primeros signos del cumplimiento del anhelo que expresamos al comienzo del Plan de que la influencia edificadora de la Fe se expandiera a cientos de miles de personas por medio del proceso de instituto. Todo parece indicar que, al término del período de Ridván, el número de programas intensivos de crecimiento en todo el mundo habrá sobrepasado los 1.000. Qué otra cosa podemos hacer al inicio de la más alegre Festividad que no sea inclinar nuestras cabezas en humildad ante Dios y darle gracias por Su ilimitada generosidad para con la comunidad del Más Grande Nombre.

[firmado: La Casa Universal de Justicia]

martes, 21 de abril de 2009

Mi Cumpleaños Espiritual

21 de abril de 1998, 5.30pm. El sol en la ventana, la gente en las calles, en su propio mundo, y el mundo, girando en sus propios asuntos. Aquí adentro, yo, orando, leyendo una tarjeta, firmando. Viendo la luz por primera vez en mi vida...

Hace once años me declaré como un seguidor de Bahá'u'lláh, comencé a reconocerme a mí mismo como un Bahá'í. Ahora siento que toda mi vida fue algo así como un ensayo, como una preparación para lo que vendría después. Ahora todo cobra sentido: las dificultades, las confusiones, los dolores... Todo lo que me fue formando para ser hoy lo que soy. Y aunque sé que todavía soy imperfecto e inacabado, también sé que estoy en el camino correcto, que todas las decisiones de mi vida no se comparan a la decisión perfecta que tomé hace once años: ordenar mi vida y mis asuntos en armonía con los principios Bahá'ís, esos principios que rescatan y dan felicidad aun en los momentos de mayor dureza.

Soy uno más entre varios millones, y aunque mi luz no es tan potente como algunas verdaderas antorchas que andan iluminando el mundo con sus buenas acciones, esta luz está viva, ardiendo con el calor de la certeza y tratando de crecer y arder con la potencia de mil fuegos.

Gracias Yobanny, Caroline, Ana, Antonio. No sé si llegaron a saberlo o a darse cuenta alguna vez, pero sépanlo: su compañía, sin darme cuenta, me fue acercando cada vez un poco más a mi fuente de vida. Sin saberlo, yo estaba siendo guiado amorosamente por Dios hacia la Revelación de Bahá'u'lláh y ustedes eran los instrumentos que Él estaba usando con Sus propias manos.

Tengo tanta felicidad y siento tanta gratitud a Dios que me dan ganas de abrazar al mundo entero, así que decidí comenzar con ustedes.

¡Gracias!

sábado, 31 de enero de 2009

La Relación de la Fe Bahá'í con el Cristianismo*






Para quienes se criaron en la tradición cristiana es legístimo preguntar cómo se relaciona la Fe Bahá'í con las enseñazanzas de Jesús. La respuesta ha de encontrarse en el mismo Nuevo Testamento. Jesús aclaró que el libro de la revelación no sería cerrado una vez lograda Su misión terrenal y la de Sus seguidores inmediatos. Al contrario, cuando Su permanencia entre los hombres tocaba a su fin, Él dijo: "Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar. Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad". (S. Juan XVI, 12, 13)

¿Habría proferido Cristo estas palabras de haber creído que el día de los Profetas había terminado, que una vez que Él fundase Su iglesia no serían necesarios más Profetas? En ese caso, ¿no habría dicho Él simplemente que no aparecerían más Profetas? En lugar de eso, instruyó cuidadosamente a Sus seguidores sobre cómo distinguir al verdadero Profeta del falso: "Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado al fuego. Así que, por sus frutos los conoceréis". (S. Mateo VII, 15-20)

En verdad, Él indicó frecuentemente a Sus seguidores "velar y orar por la llegada del Señor". Es un deber cristiano dar la bienvenida a todo aquel que manifieste los atributos Divinos o que sea portador de un mensaje Divino, de cualquier forma en que Él venga, pues rechazar al mensajero de Dios es rechazar a Dios. San Pablo nos dice: "Todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si hay algo digno de alabanza, en esto pensad". (Fil. IV, 8)Y nuevamente: "No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened lo bueno". (1 Ts. V, 20, 21) y San Juan escribe: "Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo. En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios". (1. San Juan IV, 1, 2)

Resulta claro entonces, de un examen de las Escrituras del Nuevo Testamento:

1. Que los cristianos deben esperar el advenimiento de nuevos Profetas, verdaderos y falsos.
2. Que incumbe a todo cristiano examinar la pretensión de todo aquel que se declare profeta, aplicando las pruebas simples pero minuciosas dispuestas por Jesús y San Juan.
3. Que si un Profeta pasa estas pruebas satisfactoriamente y prueba así Su afirmación, es un deber cristiano volverse hacia Él, aceptar Su mensaje y obedecer Sus instrucciones.



* Tomado de "El Mensaje de Bahá'u'lláh", de J. E. Esslemont, Ed. EBILA, 1973.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Un Verdadero Ejército de Paz - A Real Army of Peace


41 Conferencias from Rubén Jiménez on Vimeo.
(English version at the bottom of this post)


La Casa Universal de Justicia, cabeza de la Fe Bahá'í a nivel mundial, convocó a los Bahá'ís del planeta a una serie de conferencias que están realizándose alrededor del mundo, desde principios de noviembre y hasta fines de febrero.

Hemos llegado al punto medio de estas series de conferencias, y Rubén Jiménez, del sitio Ejército de Paz de España, ha preparado un video que resume la participación de los Bahá'ís en las veinte primeras conferencias.

Si querés saber cómo los Bahá'ís estamos construyendo un Nuevo Orden Mundial en todas las ciudades del mundo, cómo estamos unidos por una misma visión, por una misma fe, por un mismo amor a la humanidad, no podés dejar de ver este video. Si querés sentir la fuerza de nuestra unión, si querés emocionarte, conmoverte y echarle un vistazo a la unidad que trae consigo el Nuevo Orden Mundial, entonces abrí bien tus ojos, hacé click en el video y prepará tu corazón...

- 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 - 0 -

The Universal House of Justice, the Bahá'í Faith's head at the world level, called to the Bahá'ís living everywhere to a series of conferences whish are being held all over the world, since November to February.

We have reached the middle point of this conferences, and Rubén Jiménez, from ejercitodepaz.com, from Spain, has prepared a video showing the participation of Bahá'ís in the first twenty conferences.

If you want to know how Bahá'ís are building a New World Order, in every city of the world, in which way we are united by the same only vision, by the same only faith, by the same only love to humankind; if you want to be moved and touched, and have a glance of the inherent unity of the New World Order, then open your eyes, click on the video and prepare your heart...

English version:

41 Conferences from Rubén Jiménez on Vimeo.

sábado, 6 de diciembre de 2008

Decir Adiós






El martes, a las dos en punto de la tarde, mi perro Terri falleció.

Como bahá'í, sé que hay algunas oraciones especiales que tienen un poder tremendo, así que recité algunas de ellas repetidamente. También sé que, además de las oraciones, está la Voluntad de Dios, y que todas las oraciones actúan de acuerdo a esta Voluntad. Como yo deseaba que Terri viviera, no quería recordar esto último. Pero más allá de mi voluntad, está la Voluntad de Dios.

Oré y oré, con mucha fe. Terri seguía vivo, pero su situación no mejoraba, y yo continuaba orando y orando. Le susurraba palabras de cariño y le pedía que aguantara un poquito, que esto ya iba a pasar. Sus ojitos me miraban, pero no me veían, ocupado como estaba en soportar el dolor.

Un día antes, en la madrugada, había comenzado a agitarse y a tomar mucha agua. Lo primero que pensé fue que estaba envenenado porque hasta hacía unas horas lo había visto tranquilo y sin el menor síntoma de enfermedad. Era la madrugada del lunes ocho de diciembre. Salimos a recorrer la ciudad en busca de un veterinario. Todos los números de emergencia parecían burlarse de mi desesperación: sonaban y sonaban sin que nadie levantara el tubo desde el otro lado. Recién pude conseguir un veterinario el lunes al mediodía. El ocho de diciembre es feriado nacional en honor a la Virgen del Valle. Terri no estaba envenenado, sino constipado, y de tanto hacer fuerza, había expulsado la mucosa hacia afuera. Necesitaba una operación urgentemente, y el único veterinario que podía operar estaba de festejo con motivo de la Virgen.

A primera hora del martes, el nuevo veterinario revisó a Terri y me anunció que no podría operarlo, a menos que la inflamación cediera. Le puso una inyección y recetó compresas de té frío cada dos horas. En esas estaba yo, dándole palabras de aliento al perrito que, según mi mamá, era mi hermanito y, según yo, era mi hijo, cuando, de repente, a las dos en punto de la tarde, entendí. No se trataba de mi voluntad o de mi deseo o de mis necesidades. Todo esto es acerca de Dios y de Su Voluntad, del plan particular que Él tiene para cada uno de nosotros en todos los aspectos de la vida. Me alejé a un lugar solitario dentro de la casa y le pedí a Dios que, si era Su voluntad llevarse consigo a Terri, que lo hiciera rápido para que no sufriera más, pero que no permitiera que él muriera solo.

Cuando regresé, Terri estaba acostado en el piso. El instinto lo había llevado a buscar un lugar fresco y oscuro. Me arrodillé junto a él y volví a orar a Dios, repitiendo mi pedido. Apenas terminé mi oración, "mi hijo", como solía llamarlo todos estos años, falleció. Su corazoncito no resistió y expiró, pero antes levantó la cabeza en señal de dolor y me vio junto a él. Esta vez me miró, y me vio y escuchó las palabras de cariño que le susurraba con delicadeza y sintió las caricias sobre su cabecita y cerró los ojos y se alejó de mí para siempre.

Luego todo fue un tumulto. Gritar, correr, llorar, buscar al veterinario, reanimar, reanimar, reanimar, resignarse. Y luego todo fue quietud otra vez.

En medio de toda esta pena, me doy cuenta de que me debo una lección sobre el desprendimiento: No todas las cosas van a salir como yo quiera, no puedo controlarlo todo, no soy tan poderoso ni tan sabio como quisiera. Pero sí puedo, si me esfuerzo, ser todo lo humilde que sea necesario para aceptar la Voluntad de Dios.

Si aprendo esta lección, el sufrimiento de mi Terri y su partida quizás puedan cobrar un poco de sentido.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Conferencia Regional Bahá'í - Antofagasta '08: Cómo Empezó Todo Para Mí




El 20 de Octubre de este año, la Casa Universal de Justicia, órgano máximo que rige los asuntos mundiales de la Fe Bahá'í, envió un mensaje a todos los seguidores de Bahá'u'lláh, anunciando una serie de cuarenta y un conferencias en todo el planeta para que los Bahá'ís pudieran juntarse con el doble propósito de "celebrar las hazañas cosechadas hasta ahora" y "deliberar sobre las exigencias actuales". Con este mensaje, la Casa Universal de Justicia puso en movimiento, primero, los corazones y luego, la capacidad de inventiva de miles y miles de personas en los cinco continentes que deseaban obedecer al llamado. A partir de ese día, se originaron muchas historias, algunas inspiradoras, otras ejemplificadoras, aun otras con finales tristes y otras llenas de esperanza, esfuerzos y amistades nuevas. Todas estas historias son dignas de ser contadas y escuchadas. Todas estas historias son reales e involucran a personas reales que en este momento están caminando por algún lugar del mundo. Sin pretender nada más que sacar afuera, aunque sea inadecuadamente, todo lo que siente mi corazón, con más necesidad de contarme que de contar, relato ahora lo que sentí y lo que estoy viviendo. Esta es mi historia.


Mi primer contacto con el mensaje del 20 de Octubre fue justo un día después. Acababa de regresar de una reunión en la que varios miembros de Asambleas Espirituales Locales de mi país se habían juntado para reflexionar sobre los mejores modos posibles de aportar al progreso de la humanidad en los planos espiritual y material. Esa reunión que solo tomó un fin de semana tuvo el poder de reanimarme e iluminar mi mente, de modo que ahora entendía qué y cómo debería hacer si deseaba ser una fuente de bien común. Las ideas, que hasta entonces corrían locas de un lado al otro peleándose el primer lugar en la fila, comenzaron a acomodarse en mi mente, y opté por hacer lo mismo en todos los ámbitos de mi vida. Los días en que caminaba entre neblinas, tratando de ayudar a otros sin saber cómo, ahora tenían sentido. Ahora todo tenía sentido.

Así las cosas, regresé a Tartagal, mi ciudad, con la idea de renunciar a uno de mis trabajos y ganar más días de servicio a la Fe Bahá'í. Por supuesto, durante el largo viaje de regreso, me cuestioné cómo haría para llegar hasta fin de mes, pues aun con tres trabajos distintos, todavía debía estirar los billetes para hacerlos llegar hasta el día treinta; me pregunté en qué quedaría la tan ansiada maestría que deseaba comenzar, encima en otro país; traté de responder a la pregunta de cómo se hace para pagar luz, teléfono, cable, comida y mascota cuando apenas te alcanzará para una comida sencilla todos los días. Al lunes 20 de Octubre lo pasé feliz y analizando mis verdaderas posibilidades de renunciar al trabajo. Me surgieron preguntas, pero detrás de ellas estaba este sentimiento irreprimible de querer dedicar tiempo, fuerza y vida a levantar a la comunidad bahá'í de Tartagal. La respuesta me llegó al día siguiente, cuando abrí mi cuenta de correo y encontré una carta de la Asamblea Espiritual Nacional dando una breve introducción al mensaje enviado por la Casa de Justicia.

Comencé a leerlo con avidez, pero palabra por palabra, con la dedicación y la entrega que un niño le pone al último de sus caramelos favoritos. La carta hablaba de un "aumento en la conciencia de la eficacia" del Plan de Cinco Años, informaba sobre la preparación de los amigos en todo el mundo "para la expansión sitemática" y manifestaba la esperanza de la Casa Universal de Justicia de "presenciar una oleada de programas intensivos de crecimiento lanzados en los meses previos a Ridván del próximo año".

Todo eso me gustó. Continué destilando el azúcar de las palabras y encontré un doble reto, así que asumí que ese doble reto era para mí, venido directamente de Dios. Debía yo aprender a "identificar segmentos de la sociedad receptivos" para "compartir el mensaje de la Fe", por un lado, y "comprender en la práctica" cómo integrar todos aquellos elementos que hacen a una "pauta sana de crecimiento" de cualquier sociedad. Ya comenzaba a vislumbrar el trabajo que tenía por delante, y me gustaba. El deseo de liberar horas de trabajo para dedicarlas al servicio de la Fe se agudizó dentro mío. Las buenas noticias del primer párrafo y el desafío que Dios Mismo me planteaba comenzaron a bullir aquí adentro, como si esa azúcar, destilada a fuerza de leer y releer, ahora fuera puesta a fuego lento para exaltar su sabor. A medida que su dulce me inundaba, el aroma a triunfo me envolvía y me embriagaba. No podía hacer más que seguir leyendo, seguir libando.

Toda la carta era un llamado a servir, servir con esfuerzo. Me entusiasmé y me emocioné, al punto que el último párrafo me tomó por sorpresa. Esperaba yo una fiel promesa de oraciones en los Santuarios Sagrados, pero hubo otra cosa más. Cuando un mensaje de la Casa Universal de Justicia comience diciendo "Con el fin de ofrecer la oportunidad de...", más te vale estar sentado porque lo que sigue, de seguro te hará tambalear de la emoción. Al menos ese efecto tuvo conmigo. A esta altura mis ojos lloraban solos y sentía un levísimo ardor en los labios. "Anunciamos la convocatoria a una serie de conferencia regionales, cuarenta y una en total..." No podía más. Abrí los ojos grandes, tanto para leer bien el nombre de la ciudad que sería mi anfitriona, como para dar más espacio a las lágrimas, que ahora acudían apuradas a derramarse por amor. "Abiyán, Accra, Almaty, Antofagasta..." Demás está decir que me lloré hasta los caracteres de la carta, incluido el de los espacios, cuánto más el de cada letra llena de triunfo. Me apresuré a caer de rodillas al costado de mi cama, sabiendo no sé por qué ni cómo, que yo estaría allí, celebrando y deliberando, viendo y asumiendo, hazañas y exigencias. Con los ojos cerrados, henchido de emoción, llorando de alegría, le agradecí a Dios en oración y me levanté, todavía sin poder ver bien a causa de las lágrimas, pero con la mente clara, pensando en cómo hacer para viajar, en cómo hacer para que fueran todos.

martes, 2 de diciembre de 2008

Conferencia Regional Bahá'í - Antofagasta '08: Mensaje de la Casa Universal de Justicia a la Conferencia

Algunos de los 600 participantes que tuvo la Conferencia Regional Bahá'í en Antofagasta,
este fin de semana.



29 de Noviembre de 2008


A los Amigos reunidos en la Conferencia Regional en Antofagasta

Extendemos nuestros más amorosos saludos a los amigos de Argentina, Bolivia, Chile y Perú quienes se han reunido en esta auspiciosa ocasión para examinar los logros obtenidos durante los últimos dos años y medio y evaluar las posibilidades para el futuro. Verdaderamente, tienen mucho que celebrar. La historia de la Fe en sus países no deja duda en cuanto a la receptividad de los pueblos de su región al mensaje de Bahá'u'lláh. Su desafío, como el de tantos otros, ha sido desarrollar la capacidad para sotener la expansión a gran escala. Qué alegría nos ha traído atestiguar, particularmente en años recientes, sus pacientes y diligentes esfuerzos para enfrentar este desafío. Extrayendo de las lecciones aprendidas sobre todo por sus comunidades hermanas en América Latina, han logrado implementar en agrupación tras agrupación los elementos necesarios para poner en movimiento un proceso duradero de transformación colectiva --un proceso que puede crecer rápidamente para tocar las vidas de decenas de miles de personas en su región. Ustedes están fomentando un ambiente que conduce a la adoración comunitaria; están proporcionando educación espiritual a niños; están canalizando las energías de los pre-jóvenes y están ofreciendo la oportunidad a crecientes números de jóvenes y adultos para estudiar la Palabra Creativa y realizar actos de servicio. Y en las 14 agrupaciones donde estas actividades han sido combinadas con otros elementos para crear programas intensivos de crecimiento están alcanzando resultados notables. Que su propio proceso de aprendizaje ha avanzado considerablemente, es claro. Que están preparados para realizar un salto formidable hacia delante, es innegable.

La meta ahora ante ustedes, la de lanzar otros 14 programas de crecimiento hasta Ridván de 2009 manteniendo los 14 ya en marcha, requerirá una concentración aún mayor de esfuerzo. Al concebir planes para las semanas y meses por venir, no deberían subestimar la vasta reserva de talento y energía que representan los jóvenes entre ustedes. Estén confiados, también, que su fe y determinación, su constancia y dedicación, atraerán confirmaciones divinas. Sin importar cuán fuertes sean las fuerzas que están desgarrando la tela de la sociedad, que los lazos que los unen se mantengan firmes. Sin importar cuán oscuro sea el horizonte al que se enfrenta el mundo, que el fuego del amor de Dios encendido en sus corazones arda birllantemente. Les aseguramos nuestras más fervientes oraciones en su nombre en los Santuarios Sagrados.



(Firmado: La Casa Universal de Justicia)

domingo, 20 de abril de 2008

Soy Bahá'í




¡Mi Dios, mi Adorado, mi Rey, mi Deseo!

¿Qué lengua puede expresar mis gracias a Ti?
Yo era negligente, Tú me despertaste.

Yo me había alejado de Ti,
Tú me ayudaste bondadosamente a volver hacia Ti.

Yo era como un muerto,
Tú me vivificaste con el agua de vida.

Yo estaba marchito,
Tú me reanimaste con la corriente celestial de tu Palabra
que ha fluido de la pluma del Todo Misericordioso.

¡Oh Divina Providencia!

Toda la existencia es engendrada por tu munificencia;
no la prives de las aguas de tu generosidad
ni del océano de tu misericordia.

Te imploro que me ayudes y me asistas
en todo momento y en todas condiciones.
Y anhelo tu antiguo favor del cielo de tu gracia.

Tú eres, en verdad, el Señor de bondad y
el Soberano del reino de la eternidad.

- Bahá'u'lláh -

Hace diez años y unos cuantos meses, cuando estaba investigando sobre la Fe Bahá'í, tuve la oportunidad de participar en el Congreso del Movimiento Juvenil Bahá'í que se hizo en Chile. Mientras estuve allí, soñé con 'Abdu'l-Bahá.

En mi sueño, yo y otros más caminábamos sobre una gran rueda de madera que llevaba dos ejes en cruz. Entonces apareció un óvalo negro que flotaba en el aire, como esas puertas a otra dimensión que se ven en las películas de ciencia ficción. Era 'Abdu'l-Bahá. Sí, ya sé, no estaban su cara ni su cuerpo, pero era su voz y era Él. Cosas que tienen los sueños. La Voz me decía que debía seguir caminando sobre la rueda, y que no me saliera de ella, pues estaría perdido.

Ese congreso fue clave para mí. Por ejemplo, en esa época, yo era muy rebelde y caprichoso (lo admito, todavía me quedan resabios de ambas cosas), y si bien ya me sentía identificado con la Fe Bahá'í, no firmaba mi tarjeta de ingreso porque, decía yo, eso no cambiaba en nada mis sentimientos. Cuando mis amigos me insinuaban que debía firmar mi tarjeta de ingreso formal a la Fe, sus palabras solo lograban alentar a mi pobre alma inmadura en su terquedad. Así que cuando estuve en el congreso, hablé de esto con una consejera, y recibí una respuesta tan sencilla como contundente: yo no debía firmar mi tarjeta por nada, salvo por amor. Ella me dijo que hay cosas que nuestros padres nos piden y que a veces nosotros no entendemos. Lo mismo ocurre con Bahá'u'lláh, Quien habla a través de la Casa Universal de Justicia. La Casa de Justicia pide un ingreso formal por asuntos administrativos y estadísticos, y yo debía firmar esa tarjeta sólo cuando mi amor por Bahá'u'lláh fuera tan grande que sería capaz de obedecerlo aun sin entender Su pedido.

Eso fue todo. No había más vueltas que darle al asunto. Lo próximo fue preguntarme cuán grande era mi amor por Bahá'u'lláh y si la medida de ese amor podía llevarme a confiar en Él con los ojos cerrados.

El 21 de Abril de 1998, a las cinco de la tarde, me encerré en mi cuarto, solo yo y mi tarjeta de ingreso. A solas con Bahá'u'lláh. En medio del silencio y la solemnidad, ofrecí una oración y firmé donde decía que soy un seguidor de la Gloria de Dios. Con todos mis sentidos concentrados en ese momento de magia personal, aceptaba a Bahá'u'lláh como el Mensajero de Dios para esta época, reconocía sus enseñanzas, las entendía y me sometía a ellas. Mi mente asistía, con todos sus poderes, a mi propio nacimiento, una nueva creación de mí.

Varios meses después, estando solo en mi cuarto, comencé a llorar porque tenía problemas que me estaban asfixiando. Esta vez, la soledad del cuarto me ahondó más la pena y el sentido de abandono. Entonces pensé en Bahá'u'lláh y en lo que significaba ser Bahá'í. Hasta entonces, mi mente había entendido con claridad lo que implicaba ser Bahá'í, pero sucedió algo mientras la tristeza se hacía lágrimas: sentí a Bahá'u'lláh abrazándome suavemente, como cuando un papá abraza a su hijo porque quiere aliviarle el dolor. ¡Él estaba ahí! Yo seguí llorando, esta vez de emoción, porque por fin mi corazón sentía lo que mi mente ya había entendido: que era un hijo de Dios, que no estaba solo, que nunca lo estuve. Supe y sentí que era un seguidor de la Gloria, un Bahá'í.

Sé que no soy el mejor hijo que Dios ha tenido, y que todavía sigo mudando de piel, unas veces con más o menos dolor y dificultad que otras. Pero estoy aquí, de pie. Y como dice la oración, sea lo que yo sea, aun soy Su hijo.

viernes, 11 de abril de 2008

Aprendamos A Leer - Yah’ Yin A Nayij



El siguiente artículo apareció en algunos periódicos de la provincia de Chaco. Fue escrito por Lecko Zamora, perteneciente al pueblo Wichí, en marzo de 2008.


La lectura es esencial en la vida de cada ser humano
Y la lectura
no es solo del ser humano, sino de cada criatura que tiene vida.
Para poder desarrollarse depende de su lectura en su medio y en la vida
Para el ser humano hay dos libros, el libro de la naturaleza
y el libro de la revelación del Gran Espíritu.

Nuestros pueblos indígenas fueron sabios por excelencia en la lectura de la naturaleza.
A través de nuestros sabios, los Hayawu, los Piogonak,
conocidos como shaman, leían los sueños, las estrellas, los espíritus, la hoja de coca,
los cantos de las aves. Por esa lectura aprendimos a convivir con el medio ambiente,
ellos en sus reuniones alrededor de un fuego nos enseñaban a leer.

Juntos, quemando ignorancia, nos instruían en el aprendizaje de la lectura
creando alas a nuestra imaginación, a nuestra conciencia y a nuestro espíritu.
Nuestros mayores de mi Pueblo Wichí fueron nuestros alfabetizadores,
padres, hermanos, tíos y en especial nuestros abuelos.
Aprendimos a leer el monte y así comprender que en él sus criaturas

Tienen su razón de ser y su utilidad, y así las transformamos en medicina o en alimento.
En el río leemos que cada pez tiene una forma particular de nadar,
Los cantos y las melodías de las aves nos transmiten mensajes.
También aprendemos que los adornos en nuestros tejidos son mensajes.
Ellos, los sabios, leen nuestros rosotros y nuestros espíritus y también son nuestros libros.

La lectura es una magia, un poder y un talismán.
Magia porque un conjunto de signos producen palabras y palabras,
tienen poder que influyen en nuestros espíritus y en las mentes de los demás,
y muchas veces como un talismán nos protegen de cometer errores que hasta podrían costar nuestras vidas.

Es verdad, la lectura es muy importante en este mundo lleno de diversidades.
Cada pueblo tiene una forma de leer la vida y eso es bueno saber y respetar.
Pero hoy es un tiempo en el que de una u otra manera nos hemos acercado
alrededor del fuego de la vida, y juntos debemos instruirnos
en la lectura que mueve al mundo como sangre vital.

Aprender a leernos es un reto al cual estamos llamados en este Día
para lograr construir una sociedad justa y equitativa,
y para esto es necesario informarnos.
Una de las maneras más importantes para informarnos e instruirnos
es aprender a utilizar esta otra herramienta que es la lectura
de libros, de periódicos, de internet.

Muchos de los saberes hoy día se encuentran a través de esta otra forma de lectura.
Leer es una forma de liberarnos y liberar muchas cosas.
Leer los textos nos lleva a una transformación.
Leer nos transporta y nos hace conocer el pasado, el presente y hasta el futuro.
Leer da un significado especial a los libros.

Leer es dar vida a los escritos y a sus autores.
Leer es compartir lo leído es alimentar nuestro cuerpo mental y espiritual.
Leer y meditar los escritos es hablar con el libro.
El libro siempre nos está esperando.
El libro es un buen compañero,
El libro es un gran maestro.

La lectura es importante para crecer y creer.
Si sabemos leer podemos leer para nosotros y para otros,
pero creo que es mejor para nosotros y para los otros enseñar a leer.
Compartir los libros y brindar libros es un acto de generosidad y altruismo,
Así aprenderemos a leernos mejor.

En Wichí leer se dice «yah'yen», que quiere decir «Mirar Profundo».
Viene de la palabra «yah'hene», advertir, prevenir, avisar o instruir.
Su raíz es «yah'yin», ver mirar, observar, y según como se pronuncie significa mirar con cuidado y prevención.
Así, cuando nosotros despedimos a alguien que transita, que se va,
le decimos «yah'yin a nayij», «mira tu camino», lee la vida.

Quizás ahora podamos agregar "lee libros".

viernes, 4 de abril de 2008

¿Te Animás a Ser Un Zaje?

«En pocas palabras, todo esfuerzo y dedicación realizados por una persona con todo su corazón, es adoración, si están inspirados en motivos elevados y el deseo de servir a la humanidad. Esto es adoración: servir a la humanidad y proveer las necesidades de las gentes. El servicio es oración.»

Abdu'l-Bahá


En los medios de comunicación, en la calle, en ámbitos académicos, en las conversaciones cotidianas... Por todos lados puede escucharse quejas sobre la condición cada vez más crítica de la humanidad. Muchas quejas, muchos reclamos, pero muy pocas manos levantadas a la hora de ofrecerse a hacer algo para cambiar esta condición; muy pocas caras en el campo del servicio humanitario, muy pocas personas realmente trabajando por un verdadero desarrollo comunitario.

La postal de arriba fue creada por un círculo de estudio de Buenos Aires como un acto de servicio a sus pares. Se trata de un grupo de amigos que se juntó para hacer el curso sobre la dimensión espiritual del ser humano llamado "El Brillo de la Vida del Espíritu".

El curso entero consiste en una reflexión conjunta sobre tres temas: el uso de los escritos sagrados de la Fe Bahá'í como alimento para el alma, la oración como vía de conexión con lo más sagrado e íntimo de la vida, y el verdadero significado de la muerte y de la vida, puesto en perspectiva. Todo el curso está diseñado para ayudar a un (re)despertar de la espiritualidad, sin importar el origen religioso de los participantes.

Este grupo de amigos bautizó a su círculo de estudio con el nombre de SerUnZaje. La historia de los Zajes es muy bonita e inspiradora, y está narrada en la postal de arriba. SerUnZaje armó y envió postales como esta durante un año entero a muchísimas personas en todas partes del mundo. Muchos de los que las recibimos encontramos en estas postales una forma de mantenernos conectados espiritualmente y un oasis de tranquilidad en medio del ritmo vertiginoso de la vida moderna.

Para acceder desde aquí a la versión en español de todas las fotos que SerUnZaje repartió durante un año, podés hacer click en la imagen de arriba o verlas al costado, bajo el título «Palabras del Alma», donde están pasando como diapositivas. Haciendo click sobre cualquiera de ellas se puede acceder a la galería de Picasa que alberga todas las fotos en español.

El curso "El Brillo de la Vida del Espíritu" brindó a SerUnZaje el espacio adecuado para la creación de las postales como un emprendimiento de servicio comunitario.

Este curso se ofrece gratis en todo el mundo a través de los institutos de formación que llevan adelante las comunidades Bahá'ís en todos los países. "El Brillo de la Vida del Espíritu" forma parte de una secuencia de cursos cuyo propósito es fortalecer a las bases para crear verdaderos núcleos de comunidad en los que la participación y el sentido de unidad son sus notas características. A través de la secuencia, los participantes van tomando conciencia del lugar que ocupamos en la Tierra como seres humanos y van desarrollando capacidades para el progreso de la vida comunitaria. Con estos cursos se promueven la inclusión social y una visión orgánica y sistémica de la sociedad, en un ambiente de camaradería en el que cada uno puede expresar sus propios talentos y capacidades para la construcción de estos núcleos de vida comunitaria.

Para más información sobre los círculos de estudio o sobre cómo iniciar uno con tus amigos o con personas nuevas cerca tuyo, hacé clic en el siguiente vínculo y buscá tu país en la lista:

http://www.bahai.org/national/amr

En Argentina:
http://bahais.weebly.com/ (para Buenos Aires, CF)
http://nurenquilmes.tripod.com/ y http://quilmesdelagloria.weebly.com/ (para Quilmes y el Gran Buenos Aires)
http://www.bahai.org.ar/ o instituto@bahai.org.ar (para el resto del país)

En España:
http://www.bahai.es/articulos/actividades

En Estados Unidos:
http://contact.bahai.us/ (en inglés)

sábado, 29 de marzo de 2008

Investigar + Practicar = Ser Mejor

Un hombre fue a una barbería a cortarse el cabello, y entabló una conversación con la persona que lo atendió. De pronto, tocaron el tema de Dios.
El barbero dijo:
_Yo no creo que Dios exista, como usted dice.
_¿Por qué dice usted eso? - pregunto el cliente.
_Es muy fácil, al salir a la calle uno se da cuenta de que Dios no existe. O dígame: ¿acaso si Dios existiera, habría tantos enfermos? ¿Habría niños abandonados? Si Dios existiera, no habría sufrimiento ni tanto dolor para la humanidad. No puedo pensar que exista un Dios que permita todas estas cosas.
El cliente se quedó pensando, y no quiso responder para evitar una discusión. Al terminar de cortarse el cabello, el cliente salió del negocio y vio a un hombre con la barba y el cabello largo.Entró de nuevo a la barbería y le dijo al barbero:
_¿Sabe una cosa? ¡Los barberos no existen!
_¿Cómo? Si aquí estoy yo.
_¡No...! -dijo el cliente- No existen, si existieran no habría personas con el pelo y la barba tan larga como la de ese hombre.
_Los barberos sí existen, es que esas personas no vienen hacia mí.
_¡Exacto! -dijo el cliente-. Ese es el punto: Dios sí existe, lo que pasa es que las personas no van hacia Él y no le buscan, por eso hay tanto dolor y miseria.
El cliente se fue y el barbero, que antes había aceptado muchas ideas por tradición, ahora se quedó pensando.

Muchas veces, actuamos del mismo modo que el barbero del cuento, aceptando ideas poco pensadas simplemente porque nos las enseñaron nuestros padres, la escuela o algunos seres queridos. Los humanos somos los únicos seres vivos que tenemos libre albeldrío y razonamiento profundo, sin importar el grado de instrucción recibida. Aceptar ideas ajenas sin pasarlas por el tamiz de nuestro propio razonamiento es desmerecer nuestras capacidades intelectuales y espirituales, es el acto de negarnos a nosotros mismos por no hacer valer nuestra doble naturaleza material y espiritual.

Uno de los principios fundamentales de la Fe Bahá'í es la libre investigación y aplicación de la verdad. Esto es un derecho humano básico, el motor que nos lleva a la prosperidad y el engrandecimiento colectivos. Este principio involucra las dos caras de una misma moneda, un derecho y una responsabilidad al mismo tiempo: el derecho a buscar, conocer, aprender, investigar por nosotros mismos y libres de toda presión e influencia no solicitada, y la responsabilidad de ser coherentes y poner en práctica aquéllo que por nosotros mismos descubrimos como una verdad. Así que mi intensión en esta oportunidad es dejarte pensando en las veces en que hemos caído en el facilismo y la engañosa comodidad de dejarnos llevar por lo que los demás dicen, y tratar de identificar situaciones para revertir este hábito vicioso en el que, dicho sea de paso, yo mismo he caído varias veces.

Y a propósito del cuento, para muchos la existencia de Dios es una cuestión resuelta, pero para otros es un tema pendiente. Desde mi humilde experiencia personal como ex-ateo que buscaba gatos negros inexistentes en un cuarto oscuro con los ojos vendados, puedo decir que lo referido a Dios no debe ser analizado solamente con nuestras capacidades intelectuales; falta prestar atención a nuestros sentidos espirituales, lo que se vuelve un gran desafío para muchos que todavía arrastran -a conciencia o sin saberlo- las limitaciones materialistas y positivistas que nos impuso la educación tradicional. Es uno de los desafíos más fuertes que muchos podamos enfrentar, pero es, con toda convicción, el desafío que más nos acercará a un nivel de conciencia superior y a una versión mejorada de nosotros mismos.

Les agradezco a dos Elizabeth, mi amiga de Perú y mi amiga de Bolivia, que me hicieron llegar el cuento por mail, y le agradezco a quien lo haya escrito, pues creó un excelente disparador para reflexionar sobre uno de los temas más discutidos de la humanidad.

Ya sea que esta entrada te haya gustado o no, coincida con tus ideas o no, dejame un comentario y vamos a charlar un rato. Dame la oportunidad de seguir ampliando mi verdad a través de vos.

jueves, 20 de marzo de 2008

Dos Regalitos de Año Nuevo

Es la noche del 20 de marzo. Durante todo el día de hoy, a medida que iba oscureciendo en diferentes partes del mundo, los Bahá'ís fueron finalizando su ayuno de diecinueve días para recibir el año nuevo Bahá'í.

Hoy estuve todo el día pensando en esto del poder de la unidad. Al rededor de siete millones de personas, de orígenes culturales y raciales muy diversos, están unidas en una celebración de significados espirituales, lo que demuestra que más allá de las diferencias que se ven en la superficie de la raza humana, ésta es una sola e integrada por fuertes lazos espirituales. Si aprendemos a usar estas cualidades de unidad y unicidad, podremos lograr un verdadero progreso en todas las esfera de la vida. Y así, simples átomos como somos en este universo infinito, podremos experimentar la grandeza de convertirnos cada uno en soles que irradien una luz y un calor de naturaleza divina. Los Bahá'ís sabemos que esto es posible ¡y lo estamos logrando!

Aquí les dejo dos regalitos, uno en inglés, al que se puede acceder haciendo clic AQUÍ y el otro en español, que se puede ver abajo. Se trata del Más Grande Nombre dentro de una estrella de nueve puntas, símbolo de la Fe Bahá'í.

domingo, 16 de marzo de 2008

¿Qué Es La Fe Bahá'í?*

Entrada al Santuario del Báb, en Tierra Santa,
epicentro administrativo y espiritual de la Fe Bahá'í.


La Fe Bahá'í es una religión mundial cuyo propósito es unir a todas las razas y pueblos en una Causa Universal y en una Fe común. Los Bahá'ís son los seguidores de Bahá'u'lláh, y creen que Él es el Prometido de Todas las Épocas. Como es sabido, las tradiciones de casi todos los pueblos contienen la promesa de un futuro en el cual la paz y armonía serán establecidas en la tierra y la humanidad vivirá en prosperidad. Creemos que la hora prometida ha llegado y que Bahá'u'lláh es el Gran Personaje cuyas Enseñanzas permitirán que la humanidad construya un nuevo mundo. En uno de sus escritos Bahá'u'lláh dice:

«Lo que el Señor ha ordenado como el supremo remedio y el más poderoso instrumento para la curación del mundo entero es la unión de todos los pueblos en una Causa Universal, en una Fe común.»
Una de las enseñanzas que nos dejó Bahá'u'lláh es sobre Dios y nuestra relación con Él. Bahá'u'lláh nos enseña que Dios es incognoscible en Su Esencia. Esto quiere decir que no debemos hacer imágenes mentales de Dios, pensando en Él, por ejemplo, como si fuera un hombre. En términos generales, lo que ha sido creado no puede comprender a su creador. Por ejemplo, una mesa no puede entender la naturaleza del carpintero que la construyó. La existencia del carpintero es completamente incomprensible para los objetos que construye.

Dios es el Creador de todas las cosas. Él ha hecho los cielos y la tierra, con sus montañas y valles, sus desiertos y sus mares, sus praderas y sus árboles. Dios ha creado a los animales y Dios ha creado al ser humano. La razón tras nuestra creación, nos dice Bahá'u'lláh, es el amor. Él dice así:

«¡Oh Hijo del Hombre! Amé tu creación por eso te creé. Por tanto, ámame para que mencione tu nombre y llene tu alma con el espíritu de vida.»
Entonces, aunque la existencia de Dios está más allá de nuestra comprensión, Su amor toca nuestras vidas y nuestros seres incesantemente. La forma por medio de la cual Su amor fluye hacia nosotros es Su Eterno Convenio. De acuerdo con Su Etenerno Convenio, Dios nunca nos deja solos y sin guía. Cuando la humanidad se aleja de Él y olvida Sus Enseñanzas, la Manifestación de Dios aparece y nos da a conocer Su Voluntad y Propósito.

La palabra "manifestar" significa revelar, traer a la luz algo que no se conocía antes. Las Manifestaciones de Dios son esos Seres especiales quienes revelan a la humanidad la Palabra y la Voluntad de Dios, entonces, cuando les escuchamos, estamos respondiendo al Llamado de Dios.

Hay un ejemplo en el mundo físico que nos ayuda a comprender el concepto de "Manifestación" como lo enseña Bahá'u'lláh. En este mundo, el sol es la fuente de todo el calor y la luz, sin los cuales no existiría la vida sobre el planeta. Sin embargo, el sol no desciende a la tierra y si tratáramos de acercarnos a él nos consumiría totalmente.

Pero supongamos que tomamos un espejo bien pulido y lo apuntamos hacia el sol. En él veremos la imagen del sol, y cuanto mejor pulido esté el espejo, más perfecta será la imagen que refleje. Las Manifestaciones de Dios son como Espejos perfectos que reflejan la Luz de Dios en todo su Esplendor. Y todos estos Espejos reflejan la misma Luz. Mientras que Dios está fuera de nuestro alcance, estos Seres perfectos llegan a nosotros de tiempo en tiempo, viven entre nosotros, nos dan guía y nos llenan de la energía que necesitamos para progresar, material y espiritualmente.

Muchas personas, entre ellas seguramente vos, son afortunadas de haber sido criadas de acuerdo con las Enseñanzas enviadas por Dios a la humanidad hace unos dos mil años por medio de Su Manfiestación, Cristo, cuya estación es la de Hijo de Dios. Ahora vos podés recibir las Enseñanzas de una nueva Manifestación, Bahá'u'lláh, cuyo título significa la Gloria de Dios. Las Enseñanzas de Bahá'u'lláh están en perfecta armonía con las Enseñanzas de Cristo, pero responden a la condición en que se encuentra la humanidad hoy día. Si pensás un momento en la condición crítica de la humanidad, estoy seguro que estarás de acuerdo en que el momento es apropiado para que haya aparecido una nueva Manfiestación de Dios. Permitime compartir un pasaje de los Escritos de Bahá'u'lláh que habla sobre el Día en que vivimos:

«Este es el Día en que los más excelentes favores de Dios han sido derramados sobre los hombres, Día en que Su poderosísima gracia ha sido infundida en todas las cosas creadas. Incumbe a todos los pueblos del mundo reconciliar sus diferencias y, con perfecta unidad y paz, morar bajo la sombra del Árbol de Su cuidado y amorosa bondad.»
Tal vez quieras preguntar algo sobre la Fe Bahá'í o sobre esta primera enseñanza de Bahá'u'lláh, acerca de Dios y nuestra relación con él. Si es así, dejame tu comentario y estaré feliz de que podamos iniciar un diálogo sobre lo que he presentado aquí.

¿Qué pensás de lo que he dicho hasta ahora?


* Presentación adaptada de Libro 6. Enseñemos la Causa, un curso sobre la vida espiritual y sus grandiosas implicaciones, ofrecido por las comunidades Bahá'ís de todo el mundo.
blog musique